La Fiscalía paraguaya ordenó hoy la prisión preventiva para el ex fiscal general del Estado Javier Díaz Verón por un presunto delito de enriquecimiento ilícito y para su esposa, María Selva Morínigo, por un supuesto lavado de dinero.
El Ministerio Público presentó además sendas imputaciones contra ambos, así como el embargo de bienes. La actual fiscal general del Estado, Sandra Quiñónez, confirmó en su cuenta social la resolución de la Fiscalía.
Díaz Verón, de 55 años, se apartó en enero de forma temporal del cargo tras la investigación abierta en su contra por la propia Fiscalía por un presunto enriquecimiento ilícito.
El Ministerio Público abrió la investigación por una supuesta tenencia de terrenos en el Chaco paraguayo que figuran a nombre de la suegra de Díaz Verón, así como la adquisición de cabezas de ganado que, presuntamente, no refleja su declaración pública de bienes. A finales de enero, la Coordinadora de Abogados del Paraguay (Coapy) hizo extensible esa denuncia penal por presunto enriquecimiento ilícito a su esposa y a los hijos de ambos.
Coapy dijo contar con datos que hablaban de 3.000 millones de guaraníes (más de 500.000 dólares) que fueron puestos en sociedades anónimas por la esposa e hijos de Díaz Verón.
Ambos serían además, de acuerdo con la Coapy, accionistas de una industria de tratamiento de tripas naturales, en la que la esposa de Díaz Verón habría invertido unos 267.000 dólares
Díaz Verón explicó a principios de enero que la investigación abierta por presunto enriquecimiento ilícito cuanto menos era «errónea o no se ajusta a la verdad».
Tras las denuncias de la Coapy, Díaz Verón pidió un permiso para preparar su defensa y designó a Alejo Vera como fiscal interino.
Hasta que en marzo fue designada Quiñónez, primera mujer fiscal general del Estado, tras un proceso de selección.
