LOQUESUCEDE, HAITÍ .-El Gobierno de Haití quiere multiplicar por once el contingente de su Ejército, pasando de los cerca de 450 militares con los que cuenta en la actualidad a unos 5.000 efectivos al final de 2021, afirmó este jueves el ministro de Defensa, Walnard Dorneval.
“Antes del final del año que viene, las Fuerzas Armadas de Haití alcanzarán los 5.000 militares”, afirmó Dorneval en su intervención en la 14 Conferencia de Ministros de Defensa de las Américas, que en esta edición se celebró mediante videoconferencia dirigida desde Chile.
El ministro explicó que actualmente se trabaja en la formación de los cadetes y en el abastecimiento del equipamiento necesario para el Ejército, una institución que, según subrayó, es “indispensable para la salvaguardia de la soberanía e integridad” del territorio haitiano.
Las Fuerzas Armadas de Haití fueron refundadas por el presidente Jovenel Moise en noviembre de 2017, dos décadas después de que fueran desmanteladas por Jean Bertrand Aristide en 1995, en respuesta a la participación de los militares en el golpe de Estado perpetrado cuatro años antes.
Desde entonces, la seguridad del país está a cargo de la Policía Nacional, cuerpo que consta de cerca de 15.000 efectivos, que han sido entrenados por las fuerzas desplegadas en el país por la ONU, que terminaron su misión el año pasado.
Las Fuerzas Armadas haitianas cuentan con 420 soldados, 15 oficiales y 7 miembros del Estado Mayor, según datos suministrados por el ministro en una reciente entrevista a un periódico local.
El pasado agosto, el Ministerio de Defensa anunció por primera vez que iba a desplegar a un contingente en una base en la frontera con la República Dominicana, en concreto en el paso entre Malpasse y Jimaní, con el propósito de combatir el contrabando y el tráfico de personas, órganos, drogas y armas.
El mes pasado, el Ministerio de Defensa anunció la apertura de un nuevo proceso de reclutamiento de cadetes de ambos sexos para continuar expandiendo el contingente de las Fuerzas Armadas.
Actualmente, Haití atraviesa una grave crisis de seguridad pública debido a la acción de bandas armadas, responsables de numerosos asesinatos, robos, violaciones y secuestros. EFE
