Con el nombramiento dictatorial de 18 Directores Regionales de Eduacion el Ministro Andrés Navarro acaba de darle una puñalada mortal a la institucionalidad democrática del país, a la constitución de la República, al Estatuto del Docente y a su correspondiente reglamento.
El Ministro que luce endiosado por el poder sin límites que le ha otorgado su jefe y socio politico el Presidente Danilo Medina, en vez de consencuar tan delicada movida administrativa con la Asociación Dominicana de Profesores (ADP) prefirió imponer su voluntad de forma unilateral.
Ya el Ministro había anunciado en días recientes sus intenciones de en un futuro aspirar a la Presidencia de la República, por lo que al parecer quiere utilizar como trampolin un Ministerio de Educacion que deberia preservarse como un espacio sagrado apolítico e independiente de las conjuras del ministro de turno.
La Asociación Dominicana de Profesores ha calificado dicha decisión como una abierta declaratoria de guerra por parte del Ministro. La ADP acaba de anunciar que continuaran las protestas en las calles y la suspención en la impartición de docencia en los centros educativos públicos.
Mientras tanto los mas perjudicados por esta lamentable situación serán los estudiantes dominicanos que veran reducir las horas que reciben de docencia mientras el profesorado nacional y las autoridades educativas se mantienen enfrentados en un escenario en el que el sistema educativo quedó en el último lugar dentro de 70 países que fueron evaluados por las pruebas Pisa para medir la calidad de la educación pública.