Algunos se preguntan como fue posible que el presidente Danilo Medina no haya sido informado por su seguridad sobre los «cacerolazos» que se escenificaban en su vecindario, el exclusivo sector de Los Cacicazgos, por ciudadanos indignados por la suspension de las elecciones municipales y por la posible participación del gobierno en el sabotaje de las mismas.
Si el presidente Medina hubiese sido informado sobre la situación de seguro habría decidido llegar mas tarde a su residencia o al menos llegar en un vehículo en el que no se le identificara. Sin embargo, el presidente llegó como todos los días en su mismo vehículo, una todo terreno del año color negro y con una reducida avanzada de seguridad.
Aunque los cacerolazos empezaron a las ocho de la noche y fueron programados para realizarse por media hora, sus vecinos sorprendentemente a las nueve aun se encontraban con la misma energía chispeando sus cucharones con pailas. Al parecer, y pudiese ser altamente probable, alguien infiltró la hora en que llegaría el primer mandatario de la nación a su residencia.
