El vicepresidente del partido Fuerza Nacional Progresista (FNP), Pelegrín Castillo, y el jurista Juan Miguel Castillo Pantaleón, culparon hoy al Gobierno de que los hospitales del país sigan repletos de parturientas haitianas, porque permiten que mafias organizadas se lucren de esa práctica ilegal.
Ambos afirmaron, por separado, que esos partos masivos son parte de los “compromisos inconfesables, que se han asumido de espaldas al pueblo dominicano”, por parte de sectores de gran poder, para concretar “la solución dominicana a los problemas de Haití”.
Castillo y Castillo Pantaleón reaccionaron sobre la información periodística que indica que en 2017 más de 5,000 haitianas alumbraron en dos hospitales del país pero que la situación abarca a todos los centros de salud del territorio nacional.
La información indica que en el 2017, el 55 por ciento de los nacimientos registrados en las maternidades Nuestra Señora de la Altagracia y Materno Infantil San Lorenzo, en la capital, procedieron de madres extranjeras.
De esa cifra, el 99 por ciento corresponde a madres haitianas y el 1 por cuento a venezolanas y de otras nacionalidades.
Pelegrín Castillo
“El paritorio es en todos los hospitales. Por lo tanto, puede hablarse de un número mucho mayor”, afirmó Pelegrín Castillo en declaraciones escritas.
“Las autoridades saben en detalle cómo se desarrolla y cómo afecta al desenvolvimiento de los servicios que se prestan a las pacientes dominicanas, saben también que es ilegal y lo consienten”, añadió.
Consideró que el objetivo es reforzar la visión de que República Dominicana hace un gran servicio a Haití y la comunidad internacional, “ese enfoque que se expresa en otros campos, ha sido el responsable de que no se haya asumido un compromiso firme con la reconstrucción de Haití”.
Pelegrín Castillo argumentó que “por esa vía Haití nunca saldrá adelante y la República Dominicana se compromete con un esquema que a la postre la desestabilizará”.
Un Apunte
Haitianas abarrotan
Cifras aportadas por las maternidades Nuestra Señora de la Altagracia y San Lorenzo, indican que en esos centros alumbraron más de 5,000 haitianas en el 2017. Pelegrín Castillo y Juan Miguel Castillo Pantaleón aseguran que esa situación se extiente a todos los centros de salud del territorio nacional, con la complicidad de las autoridades del Gobierno y de organismos internacionales.
Castillo Pantaleón
El jurista Castillo Pantaleón aseguró que esas cifras le permiten ratificar su vaticinio de que “llegará un momento en que la población dominicana terminará siendo suplantada por la descendencia de haitianos, con la complacencia de una comunidad internacional”.
Manifestó que la comunidad internacional pretende endosarle a República Dominicana la población haitiana con el contubernio de las autoridades del país.
Advirtió que esa situación provocará que, con el paso del tiempo, las condiciones de miseria que afectan a la mayoría de la población dominicana se agravarán. Consideró que los recursos que dedica el Gobierno a proveer salud, vivienda, educación para los sectores más humildes, serán absorbidos por una población haitiana.
“Este modelo va en provecho del capitalismo más salvaje y creará una brecha de mayor exclusión social y económico y acumulación originaria de la renta en menos manos”, precisó.
