Y como si fuera poco el trillón de pesos en subsidios y exenciones tributarias concedidas por el actual gobierno al empresariado coneptista durante los últimos ocho años, ahora el presidente saliente Danilo Medina autorizó también la concesión futura de exenciones tributarias por 15 años al nuevo aeropuerto que se construirá en Bávaro bajo la sombrilla del Grupo ABRISA, presidido por el empresario Abraham Hazoury.
Oigase bien, por 15 largos años el Grupo ABRISA dejará de pagar impuestos por la construcción del nuevo aeropuerto en Bávaro.
Según el estudio de factibilidad financiera realizado por el Ministerio de Hacienda a solicitud del Consejo de Fomento Turístico (Confotur), este proyecto de construcción no tendría la más mínima viabilidad financiera sino fuera por esta facilidad privilegiada concedida por el primer mandatario de la nación a través de sus funcionarios en el Confotur.
El monto aproximado de las exenciones acorde a este estudio ronda los $4.4 mil millones, de los cuales el 73% correspondería a impuesto sobre la renta, el 20% de impuestos sobre activos, el 4% impuestos a la transferencia inmobiliaria, y el 2.6% al arancel e impuestos a las importaciones.
El nuevo aeropuerto del Grupo ABRISA se situaría a dos minutos de vuelo del de Punto Cana y, como ya se ha hecho norma, el Estado tendría que dotarlo de equipos técnicos que una fuente consultada estimó en unos US$40 millones.
Según fuentes, el sector público deberá cargar con una nómina de 500 personas para migración, seguridad, aduanas y controles fitosanitarios, entre otras obligaciones públicas.
Informes señalan que este nuevo aeropuerto no necesariamente incentivará el número de visitantes que vienen a ese polo turístico por vía aérea, y que el año pasado sumaron un volumen de 7.1 millones en aproximadamente 47 mil vuelos.