Ahora el honorable ex Presidente de la Junta Central Electoral, Roberto Rosario, anuncia al país su «reingreso» a las filas del Partido de la Liberación Dominicana desde donde ejercerá la participación activa en la vida política nacional. Un anuncio que fue criticado por el ex diputado Luisin Jimenez quien lo calificó como «una de las mayores imprudencias de toda la historia de la República Dominicana».
Aún quedan rastros de las huellas que dejó Roberto Rosario por la Junta Central Electoral. La nebulosa en torno a la compra y manejo que se le dio a la adquisición de costosos equipos electrónicos que no fueron utilizados en las elecciones es solo una de las tantas situaciones que acontecieron allí en una gestión altamente criticada por la falta de transparencia que le caracterizó y por la forma dictatorial en la que manejo dicha institución.
Roberto Rosario se creyó dueño de un órgano llamado a desempeñar uno de los roles mas importantes de nuestra democracia política como lo es la realización de unas elecciones equitativas, justas, participativas y diáfanas, características que no tuvieron ninguno de los torneos electorales que le tocó administrar.
Es por estas razones que muchos catalogan al honorable Roberto Rosario como uno de los peores presidentes que ha tenido la Junta Central Electoral en toda su historia.
Con este fatal prontuario de gestión pública ahora el honorable que dijo que la República Dominicana era una selva pretende erigirse como un alto defensor de la democracia nacional y como un ente importante para el desarrollo de políticas públicas.
Informaciones suministradas a este medio refieren que el honorable Roberto Rosario contempla aspirar a la senaduría del Distrito Nacional para las próximas elecciones del año 2020 para lo cual estaría conformando su equipo político con personas que junto a él trabajaron en la JCE.
Es evidente que estamos en presencia de un hombre público convencido de que lo que hizo lo hizo bien y que se siente protegido por el gobernante Partido de la Liberación Dominicana, partido al que pertenece y a quien beneficiaba en la toma de decisiones mientras fue Presidente de la JCE.
Frente a esta decisión de Roberto Rosario debe levantarse en la sociedad dominicana un total rechazo por parte de quienes si creen que las instituciones deben ser administradas por hombre probos que respeten los valores democráticos y que administren los recursos públicos apegados a las mas elementales reglas de la ética y la prudencia.
