Los precios de la gasolina en Estados Unidos están subiendo antes de la llegada de las vacaciones de verano, sin embargo, podrían acercarse pronto a los $3 dólares por galón pero esta condición dependerá del tiempo que el oleoducto más importante en el país permanezca fuera de servicio tras el ciberataque que recibió la compañía Colonial Pipeline el pasado viernes.
La AAA Gas Prices prevé que los precios de la gasolina se incrementen esta semana cómo reacción ante el cierre del oleoducto. Los datos revelados por la asociación demuestran que los precios habían estado subiendo antes del ciberataque debido a la creciente demanda de los consumidores y a la recuperación gradual de la economía.
Durante la última semana el precio promedio del galón de gasolina en Estados Unidos subió 6 centavos alcanzando hasta los $2.96 dólares según la AAA. En caso de continuar esta tendencia, un aumento de 3 centavos más llevaría a registrar un precio promedio de $2.99 dólares, alcanzando así el precio por galón más caro desde noviembre de 2014.
En caso de que el oleoducto permanezca cerrado por tres días más el precio del galón podría seguir en aumento, según lo informó la aplicación GasBuddy este lunes en su blog.
Los precios máximos y mínimos
El precio del galón de gasolina alcanzó un máximo de $4.10 dólares en California mientras el mínimo se registró en Mississippi en $2.91 dólares, según los datos dados a conocer por la AAA.
Tercer día de cierre del oleoducto
De acuerdo al Buró Federal de Investigaciones, el FBI reveló que detrás del ciberataque del pasado viernes se encuentra una banda criminal conocida como DarkSide, mientras que The Colonial Pipeline Company anunció en un comunicado que tienen previsto restablecer el servicio de manera gradual hasta el fin de semana.
La red de la compañía permite enlazar las refinerías que están ubicadas en la costa del Golfo de México con los mercados del sur y el este del país suministrando combustible a más de 50 millones de consumidores que equivale a cerca del 45% de todo el combustible que llega a la costa este del país.
Zonas de escasez
Lugares como como Mississippi, Tennessee, Georgia y Delaware podrían registrar un suministro limitado de combustible y un aumento promedio esta semana en los precios de entre 3 y 7 centavos. Sin embargo, aunque el oleoducto vuelva a funcionar, aún podría haber retrasos en la distribución ya que el combustible tarda entre 15 a 18 días en llegar desde Texas hasta Nueva York, según dijo en una declaración Jeanette McGee, portavoz de la AAA.
Los analistas han mencionado que la administración Biden podría renunciar a aplicar la Ley Jones para garantizar un suministro adecuado de combustible en los mercados estadounidenses. Esta medida permitirá a los buques de bandera extranjera transportar el producto entre los puertos del país en caso que la Casa Blanca determine que es probable que persista el cierre del oleoducto.
A pesar que se ha pedido a los automovilistas a no realizar compras de pánico ni acumular reservas de combustible ya se han registrado varios incidentes en diferentes estados lo que podría prolongar y agravar aún más los cortes y el aumento de precios.
GasBuddy advirtió que si el oleoducto permanece fuera de servicio hasta el martes de la próxima semana algunas de las gasolineras de la costa este podrían quedarse sin combustible.
En marzo un reporte de la AAA señalaba que el galón de gasolina podría alcanzar hasta los $4 dólares durante el verano en caso de que Estados Unidos limitara la producción de petróleo.
Fuente: Eldiariony
