“Nunca les daríamos a nuestros hijos cigarrillos para fumar, así que no hay ninguna razón para continuar envenenando la salud de nuestros niños con alimentos procesados“, afirmó Eric Adams, presidente del condado de Brooklyn.
Adams y Fernando Cabrera, concejal de El Bronx, buscan prohibir las carnes procesadas en los comedores de las escuelas públicas de la ciudad.
Ambos políticos son diabéticos y amparan su cruzada en un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que en 2015 dictaminó que los carcinógenos encontrados en las carnes procesadas pueden provocar problemas de salud a largo plazo. Ello incluye alimentos como tocineta, jamón, salchichas y algunas carnes frías, que pueden aumentar el riesgo de enfermedades como diabetes, cánceres múltiples y trastornos respiratorios.
También Helen Rosenthal de Manhattan y Justin Brannan de Brooklyn apoyan la propuesta desde el Concejo Municipal.
El Departamento de Educación (DOE) sirve alrededor de 950 mil comidas diarias a los alumnos, incluyendo carnes procesadas. La oficina del alcalde De Blasio dijo que está revisando esta propuesta, según Olivia Lapeyrolerie, vocera de la alcaldía.
En 2015, menos del 20% de los niños de 6 a 12 años de la ciudad de Nueva York comían más de cinco frutas y verduras por día, y uno de cada tres niños en todo el país ahora tiene sobrepeso o es obeso, detallaron los legisladores, citados por New York Post.
Además de prevenir enfermedades, la alimentación sana mejora el rendimiento escolar, la capacidad de atención y los niveles de energía, agregan los promotores de la propuesta.
