A propósito de los recientes atentados en Barcelona, España, el comentarista de El Gobierno de la Tarde, Ricardo Nieves, reflexionó este viernes sobre lo ocurrido, destacando que un acto de terror lo que busca es infundir un gran miedo, recabar en los resquicios humanos y sacar el temor más frío y la condición más animal de la persona.
Explica que por eso a quien le roban o le llevan una cartera, difícilmente vuelva a ver el mundo igual, pero que hay casos, como el terrorismo, que transforman el mundo interior y el exterior, porque un ser humano llega al umbral para cometer estos hechos, que no solo destruyen vidas, sino que barren con el sosiego y la paz.
“Mucha gente ve los cadáveres y la escena espeluznante de las personas aplastadas por unos sujetos que se salen de la esfera humana; se salen de la escala de la humanidad. ¿Y cómo reacciona el mundo? Con condenas, y los afectados de forma pavorosa, desequilibrados por un buen tiempo en su rasgo psicoemocional”, razonó Nieves.
Aseguró que la gente que estuvo allí y presenció ese acto no lo olvidará nunca, porque la siniestralidad se queda en la memoria y en el inconsciente y eso, hace que se acuñe en el espíritu y en la mente.
Reflexionó que centrarse en los tipos que llevan a cabo estos hechos, es buscar en los linderos más oscuros del comportamiento humano.
“¿Por qué una persona se convierte en una máquina de matar de una forma insensible, irracional y totalmente fuera de la razón? Los estudiosos tratan de buscar muchas explicaciones y auscultan la conducta humana y la psiquis del ser, tratan de extraer alguna conclusión al respecto”, razona Nieves.
Expresó que son muchas las teorías para tratar de dar explicación a esos actos de sujetos que han perdido el tino y que habría que ver qué está pasando en Europa con el problema migratorio.
“El problema es que esa gente que ha emigrado de sus pueblos han sido empujados y desplazados y no de la mejor manera: perdiendo familia, bienes y dejando su cultura atrás, porque unos genios en occidente se inventaron unas democracias portátiles para llevarlos a esos países que tenían condiciones de autocracia, teocracia de gobiernos autoritarios bajo el fundamento de la fe islámica”, explicó.
Narró que aconteció que occidente, a través de la tecnología se inventó una primavera que empujó a crear un ideario de democracia exportada en muchas bombas.
Dijo que todo este imaginario de la democracia tenía detrás un telón, como por ejemplo apoderarse y dominar muchas de las riquezas del subsuelo de esos países.
“La idea es hacer una reflexión de que el mundo no está bien parado: en Siria hay 2 millones de niños que no tienen padres; en Irak hay dos millones de mujeres que son viudas… hay algo que queda, la desgracia. Toda esa gente que sale desesperada y que sale a buscar oxígeno… ahí se mezclan los más radicales y extremos”, invito a analizar el también médico.
Concluye diciendo que el mundo necesita una especie de arreglo, y no es la guerra… por la inseguridad que hay de manera global con este modelo de ataque.
