El dirigente político Vinicio Castillo explotó de ira al ver como el gobierno del presidente Medina le otorgo la residencia dominicana y las garantizas necesarias al convicto narcotraficanto Augusto «Willie» Falcon para que fuese deportado por los Estados Unidos a la República Dominicana.
Castillo consideró esto como una evidencia contundente de que «RD es hedor y putrefacción».
Criticó que el presidente Medina permitiera que dicho narcotraficante termine residiendo en la República Dominicana después de haber estado presos por años en un recinto norteamericano.
Pidió explicación al gobierno para entender como es posible que un narcotraficante que no tiene nacionalidad dominicana sea deportado al país.
Dudó que dicha petición de recibir al Sr. Falcon haya sido planteado por el gobierno de Donald Trump, por lo que responsabilizó directamente al presidente Medina de lo que pudiese hacer en el país un criminal que forró de sangre la ciudad de Miami en la década del 1980.