“Ella se lo busco”, “Pero sus amigas se lo dijeron que el tipo estaba tostao y le baja el puño a otras”. “¿Y por qué no lo metieron preso?”, “Ella fumaba drogas”, “Ellos son blancos y se entienden”, “La mama protegía al carajito cada vez que hacia una de las suyas”, “Me le da la primera vez a una hija mía y lo mato de una vez”, “A mí el tipo que me intenta poner la mano hasta ese día llega”, “Le metieron un año pero ahorita lo sueltan de noche por influencia de la mama”, “Esas son vainas que pasan porque en este país no existe justicia”.
Voz experta se posiciona: “Las condicionantes excluyentes de la exclusión relacionada con la potencialidad de víctima y de victimario de ambos roles y las consecuencias climáticas de aquel día fatal donde la joven cayo de un 8vo piso, muestran una espiral de violencia que se manifiestan permanentemente en la idiosincrasia con la que ciertas patologías se expresan en las expresiones expresadas de la víctima y el victimario” (y bla bla bla…)
Mientras las comillas se encargan de recoger las citas de opiniones al aire y situarlas en algún lugar de las redes virtuales (que sociales son todas las redes entre humanos en clave colectiva), en algún lugar de la insularidad violenta un nuevo Gabriel esta en incubación y una nueva Andreaa va en camino de subordinarse a él y muy probablemente un corazón de mujer dejara de latir en cualquier momento tras cansarse de ser abusada.
Una sociedad que se organiza bajo los pilares de la banalidad mediática, la desidia por el bien común (na e na) y la flexibilidad ética no puede educar seres humanos en clave de ciudadanos con conciencia de sí y de los demás. Quien no puede pararse frente a su espejo y entenderse sin violencia, no podrá entender como respetar los límites de los demás y eso no lo enseñan en campañas publicitarias.
Rest in Peace (RIP) Andreaa (Descansa en paz quizás no será entendido), ojala tu energía transformada sirva para educar las conciencias huecas de relevancias, si así fuera, algo de tu ausencia innecesaria e injusta habrá valido la pena.
