La situación del hospital Salvador B. Gautier se ha puesto más crítica después del traspaso al Servicio Nacional de Salud (SNS), ya que no aparecen los recursos y tampoco hay cabeza con quien discutir los problemas, denunció ayer el doctor Fulgencio Severino, director del servicio de cardiología del emblemático centro de salud.
El mejor ejemplo de esta situación lo constituye la instalación de un Angiotomógrafo que lleva más de siete meses en el hospital y por falta de tres millones de pesos para la compra de un UPS no se ha podido poner a funcionar.
Con esta negativa a disponer de los recursos económicos se corre el riesgo de perder la garantía, a pesar del costo de este equipo, superior a los RD$40 millones, dijo el especialista. Tener un equipo de esta magnitud y no ponerlo a funcionar por falta de esa cantidad de dinero es condenar a los pacientes con accidente cerebrovasculares a la muerte, dijo, tras insistir en que los accidentes cerebrales constituyen la primera causa de hospitalización en el Salvador B. Gautier.
Una situación parecida ocurre con el servicio de hemodinamia del centro de salud, cuyo equipo lleva más de un año dañado y se ha solicitado al Seguro Nacional de Salud (Senasa) los recursos a título de préstamo para pagar con servicios. Sin embargo, el Servicio Nacional de Salud (SNS) no gestiona una autorización para hacer efectivo el mismo, afectando los pacientes con infarto agudo del miocardio.
“No podemos hacer coronariografía ni angioplastia y mucho menos colocar marcapasos en pacientes que permanentemente llegan a nuestro centro de salud y que son asegurados del Senasa subsidiado”, insistió el galeno.
A pesar de que el gobierno hizo el compromiso con el Colegio Médico Dominicano de respetar los derechos, existe una amenaza de dejar sin pasantía a los médicos que terminan la especialidad en estos hospitales porque el director del Servicio Nacional de Salud ha amenazado con suspender la misma, por lo que se empuja a estos centros a a paralizaciones
