SANTO DOMINGO. – El doctor Manuel Núñez Asencio, maestro y académico, calificó como desproporcionada la petición de la Asociación Dominicana de Profesores (ADP), a la luz de las últimas modificaciones que se hicieron para mejorar las condiciones de los maestros.
Consideró que el 4% del Producto Interno Bruto que recibe la educación publica dominicana ha sido una inversión a fondo perdido, “pues después de 10 años desde el 2012 lo que ha hecho es retroceder notablemente”. “Hemos tenido prácticamente dos años de un enorme asueto educativo producto de la pandemia y, aunque la educación se ha estado impartiendo por televisión y de forma virtual vía internet, la mayoría los maestros no fueron incorporados a esta modalidad y continuaron cobrado sus salarios desde sus casas”, expresó.
De igual forma, al ser entrevistado en el programa radial “Revista Dominical Dejando Huellas”, que se transmite en CDN Radio, producido por Onorio Montás, reveló que hubo maestros que estuvieron cobraron mientras la virtualidad les permitía hacer otras cosas, incluso viajar fuera del país. Según un comunicado de prensa, Núñez también planteó la necesidad establecer un sistema de evaluación del desempeño de los maestros para ver con qué eficacia se está gastando el dinero de los maestros.
“A pesar de ello, soy testigo de que el Ministerio de Educación intentó que los maestros se sometieran a una operación de reciclaje profesional y que se capacitaran en sistemas de actualización para ver la calidad del personal docente con que contamos, así como reactivar las laborares del Instituto Nacional de Formación y Capacitación del Magisterio (INAFOCAM) y las unidades de educación para vigilar la formación de los docentes”, subrayó Núñez. Asimismo, señaló que por los excesos de protestas que lleva a cabo la ADP, nunca se han completado las 1000 horas de docencia exigidas por el Ministerio de Educación en el sector público.
“Durante la gestión de Melanio Paredes se quiso llegar a las mil horas de clases presenciales, pero entre las reuniones sindicales, los días de vacaciones, las celebraciones, los días de huelga, pues a veces ni siquiera llegan al 50 por ciento, lo que evidencia que la presencia de los maestros en las aulas sea prácticamente deficiente ”, enfatizó Núñez. De igual modo, criticó la falta de un plan de supervisión del ritmo de la cantidad de contenido que se está impartido y todo eso da una pista de que se está ante una docencia sin calidad en el aspecto laboral, y con los contenidos porque no están desarrollando adecuadamente para las capacidades, las destrezas y las habilidades que deben de tener los estudiantes egresados de un curso.
