La cristiana Margarita García visitó las instalaciones del Metro de Santo Domingo para evangelizar y constatar qué tan de acuerdo están los usuarios con la medida de que en este medio de transporte, al igual que en el Teleférico, está prohibido, entre otras medidas, realizar actos religiosos.
La presencia de la pastora provocó el enojo de los cientos de jóvenes usuarios del Metro, los cuales pidieron a las autoridades imponer el cumplimiento de la resolución de la OPRET que ordena la suspensión de toda actividad religiosa que altere la armonía y el orden en el principal sistema de transporte masivo que hay en el pais.
«Los evangélicos quieren predicar la palabra a la mala, estorbando la tranquilidad de nosotros que no tenemos otra opción que escucharlos o lanzarnos del Metro», dijo uno de los usuarios del Metro consultado por este medio.
La decision de la OPRET en la que se prohibió todo tipo de actividad religiosa que altere la armonía en el Metro de Santo Domingo, ha encontrado reacciones a favor y en contra por una medida gubernamental que procura defender el derecho constitucional que salvaguarda y garantiza la privacidad e intimidad de los ciudadanos dominicanos.
