Pese a que el actual gobierno prometió en tiempos de campaña electoral desarrollar políticas públicas para crear las condiciones en las que los jóvenes dominicanos puedan desarrollar y potencializar sus capacidades introduciéndose en un mercado laboral que les posibilite realizar una labor digna, mas del 30% de los jóvenes dominicanos no ha podido conseguir un empleo a través del cual obtener los recursos económicos necesarios para la construcción de sus sueños. Lamentablemente esto acontece al mismo tiempo en que mas de un 25% de los jóvenes no esta asistiendo a un centro educativo que le permita construir la conciencia cívica necesaria para asumir los retos que les depara los nuevos tiempos.
Una franja de la sociedad altamente vulnerable ya que ante la imposibilidad de conseguir un empleo que los haga productivo y ocupe sus mentes, estos jóvenes tienden a involucrarse en actividades ilícitas para conseguir los recursos con los cuales sustentarse. Vemos como en los últimos años se ha incrementado los indices de criminalidad en la República Dominicana, y esto se debe según informes del Banco Mundial, a que en la medida en que la sociedad no le brinda oportunidades a su juventud estos tienden acercarse a los vicios y a cuestiones ilícitas.
El estado dominicano tiene el Ministerio de la Juventud que es una entidad que procura el desarrollo de políticas publicas a esta franja de la sociedad, pero lamentablemente esta institución ha sido utilizada desde su creación para el nombramiento de jóvenes que hicieron campaña con el Presidente de turno y no para el desarrollo de ideas tendentes a elevar las condiciones de vida de nuestros jóvenes.
