El vicepresidente del partido Fuerza Nacional Progresista (FNP), Pelegrín Castillo, pidió hoy al presidente Luis Abinader que haga “cambios sustanciales” en la política con relación a Haití y evite un conflicto de consecuencias impredecibles con el Gobierno y los habitantes del vecino país.
Afirmó que la política estatal para resolver el problema haitiano ha sido impuesta desde centros de poder mundial y ha sido un rotundo fracaso.
“Lejos de contribuir a la estabilidad, Haití ha agravado sus problemas”, insistió.
“Y lo que es peor, solo convierte a la República en Estado pivote y en zona de amortiguamiento de esa crisis internacional, en detrimento de millones de dominicanos más vulnerables y de la nación histórica”, dijo el ex ministro de Energía y Minas.
Una obligación
Castillo entiende que el presidente Abinader está obligado a enviar señales claras sobre ese tema.
El ex diputado expresó que sería inaceptable que las autoridades dominicanas “le agan el juego” a la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), “con su maliciosa patraña de presentar como apatridia un caso de indocumentación, por la tradicional tendencia del Estado haitiano de incumplir sus obligaciones con sus ciudadanos y con los acuerdos con República Dominicana.”
El ex congresista consideró que “unas minorías antinacionales han facilitado los planes de la solución dominicana a los problemas de Haití. Han ganado mucho, pero la nación y sus mayorías pierden cada vez más ”.
En un documento enviado a los medios de comunicación, el alto dirigente político agregó que “urge cambiar la política exterior e interior en relación a Haití, para salir de la trampa mortal en que se ha colocado a la República”.
Oportunidades
Pelegrín Castillo dijo que lamenta que el presidente Abinader haya dejado pasar dos ocasiones importantes para plantear “ese problema mayúsculo”. Se refirió a sus discursos ante la reunión conjunta de las Cámaras Legislativas y la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
“Su enfoque de solución, en principio sería el correcto, siempre que la política interior vaya coherentemente en su respaldo”, dijo.
Agregó que “este cambio histórico de política, puede a la vez unificar al pueblo dominicano, antes que sea demasiado tarde y nos precipitemos en un escenario de confrontación entre poblaciones”.
El dirigente opositor consideró que el país no puede ofrecer respaldo incondicional a la ONU ni ninguna otra organización internacional en ese problema,.
“Sobre todo, porque está más que probado que esos organismos internacionales y las potencias injeridas en Haití, país al que han enviado 5 misiones, no solo han sido un fracaso vergonzoso, sino que con irresponsabilidad criminal han pretendido montar un esquema de traslado e intercambio de poblaciones que resulta fundamentalmente perverso e inmoral”, sostuvo Castillo.
